La Misión Kepler descubre planetas habitables a 1.200 años luz

La Misión Kepler realiza uno de los descubrimientos más importantes en toda su historia, al encontrar dos planetas posiblemente habitables a 1.200 años luz de distancia.

El día de hoy se ha realizado el que podría ser uno de los descubrimientos más importantes de los últimos años, en materia de astronomía. La misión Kepler, a través del satélite que lleva su mismo nombre, han descubierto una nueva estrella que han bautizado como Kepler 62, y que sin duda quedará grabado por siempre en la mente de los astrónomos, debido a la importancia que tienen dos cuerpos planetarios que la rodean. Son, dos planetas habitables que recuerdan en muchos sentidos a nuestra querida nave espacial natural, La Tierra.

Estos planetas llevan los poco peculiares nombres “Kepler 62e y Kepler 62f, aunque este tipo de nomenclatura es muy común en el mundo de la astronomía. Se trata de dos cuerpos sólidos y rocosos que son considerados como supertierras o exoplanetas por muchos expertos, y cuyas condiciones, en teoría, los hacen ideales para albergar vida, incluso la nuestra.

En el caso de Kepler 62e las condiciones son excepcionales, aseguran los responsables de este descubrimiento en el CfA Institute. Esto se debe a que está ubicada a una distancia muy cómoda, por llamarlo de alguna manera, de su estrella, lo que le permite contar con una suficiente cantidad de radiación estelar (o solar, comparando con nuestro caso) para poder subsistir la vida, pero sin estar lo suficientemente cerca de la estrella Kepler 62 como para que sea mucha la radiación y el calor. Tiene 1.6 veces el tamaño de nuestro planeta, y completa una órbita alrededor a su estrella en 122 días.

El otro cuerpo planetario, Kepler 62f, por su parte completa su órbita en 267 días, lo que quiere decir que está más alejada que su hermano y tiene 1.4 veces el tamaño de la tierra.

Se trataría de planetas totalmente azules cubiertos de hielo y roca

Lo más curioso de este descubrimiento, es que según las imágenes captadas por este maravilloso satélite que llegó al espacio en el año 2009 con el objetivo de detectar planetas fuera de nuestro sistema solar, es que tantp Kepler 62e como 62f son cuerpos planetarios totalmente azules, por lo que estaríamos hablando de que cuentan con océanos masivos alrededor de toda su superficie. En el caso del “62f”, al estar más alejado y no recibir el calor suficiente, se estima que sería una bola de hileo, en teoría, ya que el agua de los océanos estaría congelada.

El SETI celebra este descubrimiento

1. Instituto de búsqueda extraterrestre (SETI, por sus siglas en inglés), celebra este descubrimiento por parte de la Misión Kepler y asegura que justamente esto sería lo que han estado esperando por muchos años.

Dadas las condiciones con las que cuentan estos cuerpos planetarios, en especial en el caso del Kepler 62e, se presta mucho para ser un planeta, en teoría, habitable, aunque faltan realizar muchos estudios y sobre todo cálculos para poder afirmar semejante cuestión. Aún así, desde el CfA aseguran que “nunca habíamos visto algo similar, ni en el Sistema Solar ni en otros sistemas. Tienen océanos sin fin”.

Las posibilidades de la existencia de vida en estos planetas ni siquiera se está estudiando, por los momentos, pero ciertamente el Instituto SETI pondrá su vista en dirección a este sistema compuesto de 5 pequeños cuerpos y una estrella joven, que se encuentra a “apenas” 1.200 años luz de distancia y que prometen mucho como exoplanetas habitables, aunque al día de hoy es sólo un sueño llegar a ellos.

Eduardo Marin/alt1040.com