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Opinión

Aborto libre… por un mes

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 Por órdenes del cardenal Norberto Rivera, las mujeres que aborten en Cuaresma serán perdonadas, en lo que es un ejemplo más de la doble moral que caracteriza a la Arquidiócesis de México.

Porque es la misma Arquidiócesis que en 2007 consiguió que la PGR del gobierno del panista Felipe Calderón y la CNDH promovieran (sin éxito al final ante la Corte) una controversia constitucional contra la reforma que legalizó el aborto en la Ciudad de México.

Gracias a ello, desde 2011 se han practicado 30 mil abortos, según el Instituto de las Mujeres del Distrito Federal.

Pero el vocero de la Arquidiócesis, Hugo Valdemar, acusó de “dictadorzuelo” al entonces Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, y dejó correr el rumor de que a Ebrard le seguían un proceso de excomunión.

Hoy, después de tanta alharaca, la Iglesia perdona el aborto.

Norberto Rivera otorgó a más de mil sacerdotes “facultades especiales extraordinarias” para que “aquellas personas que hayan participado directa o indirectamente en un aborto puedan recibir el perdón sacramental”

Puro fariseísmo: la Iglesia de Norberto Rivera es incongruente hasta con los preceptos del nuevo Papa, Francisco, quien apenas usa sotana blanca, sin capa ni estola, mientras alienta al clero a usar los “vehículos más humildes” y no dejarse llevar por la ostentación en su vida de servicio.

Aquí, en cambio, Norberto Rivera se traslada en autos Mercedes Benz y camionetas último modelo, aunque su oficina de prensa asegura que lo hace en un Gran Marquís de 1995 desde hace cuatro años y que antes lo hacía en una camioneta Toyota.

Una Iglesia que convive muy cómodamente con el poder político y económico. En abril de 2003, siendo AMLO era Jefe de Gobierno, le aceptó a éste el regalo de tres hectáreas frente a la Basílica de Guadalupe para que construyera la Plaza Mariana.

También le regaló las escrituras. El oficio SF/PFDF/2003/6367 detalla que el GDF destinó siete millones 90 mil 813 pesos por concepto de impuesto sobre adquisición de inmuebles, y 40 mil 745 pesos correspondientes a los derechos de inscripción en el Registro Público de la Propiedad.

Este subsidio se agregó a 156 millones 276 mil 243 pesos que valían los predios desincorporados del patrimonio de la ciudad: un total de 163 millones 407 mil 801 pesos. Con eso, la Iglesia de Norberto Rivera hizo un negociazo:

—Aceptó a Carlos Slim los 700 millones de pesos que costó la construcción de la Plaza Mariana.

—Vende en 25 mil 300 pesos cada uno de los 120 mil nichos del columbario y cobra 570 pesos anuales por mantenimiento de cada nicho.

—Cobra a 20 pesos la hora en el estacionamiento para 535 coches.

Una Iglesia cuya opción no son los pobres, francamente.

Por: Rubén Cortés / elarsenal.net

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