¿Cuál Verdad?

En las manifestaciones o marchas a todos los periodistas o reporteros nos exigen hablar con la verdad, lo hacemos y eso nos genera golpes, ofensas y descalificaciones.

¿Cuál verdad?

La verdad de los hechos, la verdad de ellos o la que ellos creen que es la verdad. En esos momentos de dudas les pones la grabadora o micrófono para que digan su verdad y se alejan, entonces de que verdad estamos hablando.

La verdad que he visto en las últimas semanas y la cual he difundido en este medio y otros más, es la descomposición y polarización social que está latente, casi a punto de estallar, a punto de crear un conflicto entre un reducido grupo de personas con autoridades.

Casualmente este reducido grupo de personas, siempre salen cada año a relucir, casualmente sobresalen en época electoral; así como usted lo lee, el próximo año habrá elecciones intermedias y serán el pulso para las elecciones presidenciales.

¿Cuál verdad? La desaparición de 43 Normalistas de Ayotzinapa en manos del crimen organizado, en manos de los sicarios de Los Guerreros Unidos, que hasta el momento no escucho reclamos en su contra, ni leo mantas o cartulinas exigiéndoles que se entreguen en las distintas marchas a lo largo del país o a nivel internacional.

¿Cuál verdad?

La de los grupos de encapuchados que se infiltran, crean caos, roban comercios y son impunes ante el amparo de miles de personas que caminan en las marchas sin saber cuales son las causas de esa manifestación. Eso me a tocado al preguntarles sobre que se están manifestando y responden que no saben, “el chiste es hacer desmadre”.

¿Cuál verdad?

La de miles de pesos perdidos en comercios establecidos tanto en el Distrito Federal, Chilpancingo y Acapulco por las movilizaciones tanto de civiles, seudo Normalistas, Normalistas, seudo profesores, profesores y sindicalistas, esas pérdidas que dejaran a miles de familias sin el alimento o sin el dinero para pagar las deudas.

¿Cuál verdad?

Esa verdad de que diversos grupos políticos, se han infiltrado en un movimiento social que era legítimo y apoyado por la mayoría de mexicanos; ahora ese movimiento es apoyado casualmente por grupos de izquierda que buscan obtener ganancias políticas, económicas y de poder en las próximas elecciones intermedias de México.

A los periodistas y reporteros nos exigen siempre hablar con la verdad, pero ¿Cuál verdad? La de ellos que hablan de crimen de Estado, porque si hablamos de crimen de Estado esos que manejan esos términos, también son cómplices de las 43 muertes, porque también forman parte del Estado. Entonces de qué verdad debemos hablar.