El nuevo villano favorito

Gustavo Madero parecía ayer un feroz opositor del PRI y sus gobiernos. El jefe panista radicalizó su discurso en la instalación de la mesa de redacción de la Reforma Política, uno de los 95 compromisos del Pacto Por México. En el Palacio de Minería, donde se realizó el acto, el hombre deshizo a los gobernadores del tricolor.

Aparentemente encarrerado en el carril opositor, habló del “bloqueo histórico” del tricolor a las reformas que el país requiere. Criticó el endeudamiento irresponsable “en los Coahuilas, los Nuevo Leones, los Quintana Roos…” Dijo que en el “ámbito local” se acuartela el autoritarismo, la opacidad, la impunidad…

Jugaba para la tribuna.

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Su homólogo del PRI, César Camacho, se prestó al juego. Tomó el micrófono para revirar al político de Chihuahua, como si la cosa fuera real: Descalificó el discurso de “la vuelta al pasado autoritario”, que tanto les gusta a los opositores, y le tiró un gancho al hígado a Felipe Calderón, un duro adversario, pero del jefe nacional del PAN.

“Es evidente que algo no tan bueno han hecho quienes habiendo logrado alternancia en una o dos elecciones. No encontraron la manera de hacerse beneficiarios del voto popular”, subrayó el priista mexiquense.

Miguel Osorio Chong, secretario de Gobernación, bajo el balón que le mandó el controvertido Madero, y cerró la controversia con las siguientes palabras: “Dirían por ahí -y lo decimos a cada rato nosotros-, así nos llevamos diciéndonos las cosas en un debate pulcro y abierto, pero construyendo por México”

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Abordamos a Jesús Zambrano sobre el intercambio entre Madero y Camacho y el comentario de Osorio. ¿Así se llevan? Preguntamos. El presidente del PRD respondió: “En no pocas ocasiones discutimos fuertemente (en el seno del Pacto) pero con el debido respeto. Lo que debe quedar claro es que, aún así, somos capaces de construir acuerdos”

Zambrano, a pesar de su sonrisa, anda “encabronado” porque nomás no le hacen caso a la demanda que ya puso en la mesa de negociaciones: el cambio a los delegados que han ocupado cargos en el PRI de sus respectivas entidades.

Y es que muchos de ellos fueron dirigentes locales del tricolor, secretarios o regidores de ese partido. No inspiran confianza a la oposición, sobre todo de cara a las elecciones que se avecinan en 14 entidades del país.

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La presencia de Jorge Luis Preciado en el podio de Minería junto con el secretario de Gobernación, el jefe de gobierno del DF, Miguel Mancera, los presidentes de los partidos firmantes del pacto y el jefe de la oficina de la presidencia, Aurelio Nuño, sorprendió a mas de uno.

Madero lo metió con fórceps, sabedor de que el colimense no tiene luz propia. “Es una cortesía con el recién llegado”, nos comentó el panista Juan Molinar Horcasitas.

La cortesía no la tuvieron con el coordinador de los senadores del PRD, Miguel Barbosa, ubicado en segunda fila. ¿Lo castigarían porque horas antes presentó, junto con Cordero , una agenda de reforma política ajena al Pacto?

Lo que si es que Silvano Aureoles, coordinador de la bancada del PRD en San Lázaro, no se privo de darle un rozón a su corrreligionario. “Barbosa se nos encorderizo”, dijo mordaz.

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El grupo del PAN en San Lázaro está contaminado por las broncas de los senadores azules. Allí también se dan con todo. Tenemos copia de la carta que el legislador calderonista, Homero Niño de Rivera, envió a sus compañeros de bancada, luego de ser removido como secretario de la Comisión de Energía.

El tono es crítico:

“Esta decisión, tomada por nuestro coordinador parlamentario, se da en clara represalia por algunas de mis posiciones en contra de la conducción de nuestro Grupo. Se me está castigando…

“Luís Alberto Villarreal (coordinador) está decidido a defender sus posiciones con rigidez, pero al interior de nuestro Grupo. Algo que no hace cuando se trata de defender las posiciones del PAN frente al gobierno de Peña Nieto. Dureza con los nuestros, mano extendida para los adversarios…”

Sin comentarios.

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Eduardo Tricio Haro, presidente del Grupo Lala, es cabeza de los empresarios que compraron más del 20 por ciento de las acciones de Aeroméxico. La empresa reporta utilidades, pero alega un conflicto de orden económico, aseguran miembros de la dirigencia del sindicato de sobrecargos. “No tiene sentido,” subrayan.

Hay sospecha de que la empresa quiere utilizar esa figura para forzar la revisión del contrato colectivo de trabajo. No otorgar aumentos salariales, ni prestaciones.

Sabemos que la senadora del PRD, Alejandra Barrales, integrante de la Comisión de Trabajo, está muy al pendiente de cómo evoluciona el conflicto. Nos dicen que anda muy pegada con Ricardo del Valle secretario general de ese sindicato.
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Voces indiscretas nos cuentan que el presidente de la SCJN, Juan Silva Meza, ha arreciado su cabildeo en el Congreso para lograr que Rodolfo Lara Ponte, Oficial Mayor de La Corte, substituya al saliente Jorge Moreno Collado como consejero de la Judicatura.

El cabildeo se intensificó a raíz de la caída de José Luís González Alcántara y Carranca, el otro candidato de Silva. Este magistrado tiene vínculos con el nuevo villano favorito: Genaro Góngora Pimentel. El fue quien ordeno reducir la pensión alimenticia de los dos hijos que el ex ministro de la corte tiene con Ana María Orozco, la encarcelada pareja sentimental del ex ministro de la Corte.

La bronca es que Lara Ponte está impedido por Articulo 100 de la Constitución, que impide a los consejeros repetir en su cargo. Fue nombrado en ese cargo en 1997.

Por: Francisco Garfias. / elarsenal.net