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Opinión

Insurgentes, desalojados

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La limpieza de la recuperación del Zócalo capitalino, efectuada implacablemente por los efectivos de la Policía Federal quiso ser imitada en otros puntos de la geografía nacional. La madrugada del sábado 14, elementos de las fuerzas de seguridad de Veracruz retiraron a un centenar de simpatizantes del movimiento de insurgencia magisterial, que habían instalado un plantón en la Plaza Lerdo de Xalapa, frente al Palacio de Gobierno. Seis horas después del desalojo de la Plaza de la Constitución, los policías de Veracruz ejecutaron las órdenes de su jefe. El ultimátum había sido externado un día antes, por Gina Domínguez, vocera del gobierno de la entidad, en ausencia del mandatario priista, Javier Duarte de Ochoa, quien se encontraba en la ciudad de México.

Inflexible, Duarte de Ochoa autorizó a su secretario de gobierno, Erick Lagos, a emplazar a maestros, estudiantes y otros sectores de la sociedad civil, a reubicar su plantón. Podían llevarse su campamento a Los Berros o a Los Lagos, pero no impedir la realización del tradicional Grito de Independencia. Sin problemas -por la superioridad numérica e instrumental de los policías, que se impuso en ese momento— el primer cuadro de la capital jarocha quedó limpio y de inmediato fue cercado. Al día siguiente, contingentes magisteriales bloquearon la carretera Xalapa-Veracruz, a la altura del Recinto Portuario. En la autopista México-Puebla —a la altura de San Martín Texmelucan— otro contingente de insurgentes impidió el tránsito vehicular. Como sus homólogos del DF y Veracruz, el gobernador de la entidad oriental, Rafael Moreno Valle, convocó a las fuerzas de seguridad para disuadir a los manifestantes. Después de semanas de negociaciones infructuosas, las autoridades proceden a la lógica del ultimátum. “Distintas corporaciones intervinieron, por las molestias que ocasionaron a los ciudadanos que utilizan esa importante vía de comunicación”, justificó ayer el gobierno poblano, “de esa manera queda claro que el Estado resguarda las garantías constitucionales de los ciudadanos”.

Agotadas las vías del diálogo, las autoridades de Quintana Roo emplazaron a los maestros a levantar el plantón que mantuvieron durante dos semanas frente al Palacio de Gobierno, en Chetumal. Se iban o enfrentaban a la policía. Antes por la promulgación de la reforma educativa, ahora por los desalojos y la represión policiaca a las bases magisteriales, que han rebasado a sus dirigentes y pronto se sumarán a los movimientos sociales que se oponen al resto de las reformas estructurales. Después de los festejos patrios, los insurgentes volverán a las plazas públicas.

EFECTOS SECUNDARIOS

¿NO SE PUDO? El mundo del espectáculo, a veces tan parecido a la política, a menudo resulta inaccesible. Y evidentemente, el gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval Castañeda, no puede compararse con Justin Bieber; es por eso que se le vio sobre el ring del MGM Arena, antier, en los momentos previos a la pelea entre su amigo, Saúl Álvarez y Roger Mayweather Jr. Representantes de la sociedad civil nayarita demandan conocer el involucramiento del mandatario priísta con Canelo Promotions, sobre todo a raíz de que trascendiera que el púgil ganó 12 millones de dólares gracias a sus patrocinadores (…) y que no cobró un solo peso por llevar la leyenda “Riviera Nayarit” en los calzoncillos. Absorto de dimes y diretes, Sandoval Castañeda mantiene su excéntrico estilo de gobernar, que incluye la limousine blanca que tripula de lunes a viernes y que los fines de semana se dedica a transportar a las quinceañeras que apadrina. Y sus fiestas, como la de ayer: una cena “para la gente” ,en la que obligó a sus funcionarios y sus esposas a atender a los invitados.

DETALLES. En las últimas semanas, en Los Pinos ha quedado constancia del disgusto del presidente Enrique Peña Nieto con el desempeño de algunos de sus colaboradores. Y no solo han sido señalados Luis Videgaray o Emilio Chuayffet –los más visibles, dadas sus responsabilidades– sino otros más, entre ellos Rosario Robles Berlanga, por haber desatendido la instrucción de apoyar a Michoacán. Enrique Martínez y Martínez, titular de la SAGARPA, fue el único que acató la orden y movilizó a los mandos medios y superiores de esa dependencia, para instrumentar el programa Con los pies en la tierra. El gobernador michoacano, Jesús Reyna, agradeció al presidente la visita de Martínez y Martínez, pero se extraño de que los demás no lo hayan hecho. Vino el regaño y ahora los secretarios hacen fila para ir a Morelia.

¿SUPLENTE? En la línea de las voceras-súper poderosas —inaugurada por Martita Sahagún y continuada por la exvocera de Felipe Calderón Hinojosa, Alejandra Sota— se inscribe Gina Domínguez Colío, encargada de la comunicación del gobierno de Veracruz, quien tuvo a su cargo el discurso oficial en la ceremonia conmemorativa del 166 Aniversario de la Gesta Heróica de los Niños Héroes de Chapultepec. Con ese gesto, el priísta Javier Duarte de Ochoa quiso acallar los rumores sobre la renuncia de su vocera. Pero fue más allá y la designó como su suplente, en caso de que el paso de Ingrid le impidiera encabezar el Grito en Xalapa. Rápidamente, le hicieron ver que la ley impide a Domínguez encabezar los festejos patrios.

por  / elarsenal.net

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