Dengue: Una amenaza invisible en constante expansión

El dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura de mosquitos infectados del género Aedes, principalmente Ae. aegypti y Ae. albopictus. Afecta a personas de todas las edades, especialmente niños, y se ha convertido en un problema de salud pública de gran magnitud en las regiones tropicales y subtropicales del mundo.

Un enemigo global:

• Presencia en 128 países: Se estima que la mitad de la población mundial, alrededor de 3.900 millones de personas, vive en áreas con riesgo de transmisión.
• Impacto significativo: Cada año se producen entre 100 y 400 millones de infecciones, con 500.000 casos graves que requieren hospitalización y alrededor de 20.000 muertes.
• Regiones más afectadas: América Latina, el sudeste asiático y las islas del Pacífico occidental son las zonas con mayor incidencia de la enfermedad.

Manifestaciones:

• Sintomatología variable: La infección puede ser asintomática o presentar un cuadro leve similar a la gripe, con fiebre alta, dolor de cabeza, muscular y articular, náuseas y vómitos.
• Dengue grave: En algunos casos, la enfermedad evoluciona hacia un cuadro grave que puede ser letal, caracterizado por hemorragias, shock y disfunción orgánica.

Factores de riesgo:

• Condiciones climáticas: El clima cálido y húmedo favorece la proliferación de los mosquitos vectores.
• Urbanización: El crecimiento desordenado de las ciudades crea criaderos potenciales para el mosquito, como depósitos de agua estancada.
• Falta de acceso a agua potable y saneamiento: Dificulta la eliminación de criaderos y aumenta la exposición a la picadura del mosquito.

Prevención y control:

• Eliminación de criaderos: Es fundamental eliminar cualquier recipiente que pueda acumular agua estancada, como llantas, botellas y macetas.
• Protección personal: Usar repelentes, ropa que cubra la mayor parte del cuerpo y mosquiteros son medidas importantes para evitar la picadura del mosquito.
• Vacunación: Existen vacunas contra el dengue para personas de 9 a 45 años que viven en zonas endémicas. La vacunación reduce el riesgo de enfermedad grave en un 65-80%.
• Manejo adecuado de casos: El diagnóstico temprano y la atención médica oportuna son esenciales para evitar complicaciones y salvar vidas.

Un desafío global que requiere acción:

• Fortalecimiento de la vigilancia epidemiológica: Permite la detección temprana de brotes y la implementación de medidas de control.
• Mejora del acceso a la atención médica: Garantiza el diagnóstico oportuno y el tratamiento adecuado de los casos.
• Investigación e innovación: Desarrollo de nuevas herramientas de prevención, como mejores vacunas y métodos de control del vector.
• Educación y comunicación: Sensibilizar a la población sobre la enfermedad, sus riesgos y medidas de prevención.

El dengue es una amenaza invisible que requiere una respuesta global y comprometida. La acción conjunta de gobiernos, organizaciones internacionales, comunidades y ciudadanos es fundamental para prevenir la enfermedad, controlar su expansión y proteger la salud pública.

Referencias:

• Organización Mundial de la Salud (OMS): https://www.paho.org/es/temas/dengue
• Organización Panamericana de la Salud (OPS): https://campus.paho.org/es/curso/diagnostico-manejo-clinico-dengue
• Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC): https://www.cdc.gov/dengue/index.html