Alrededor de 28% de los embarazos en Jalisco son de adolescentes

Guadalajara, (10 Julio 2014).- La especialista Patricia Esmeralda Romo Huerta afirmó que de entre 28 y 30 por ciento de los embarazos en el estado de Jalisco son de mujeres adolescentes.

En entrevista, la jefa del Centro de Atención a la Adolescente Embarazada del Hospital Civil de Guadalajara Dr. Juan I. Menchaca agregó que no es lo mismo un embarazo en una paciente de entre 20 a 30 años que uno en una menor de edad.

Recordó que 30.2 por ciento de las pacientes que acudían a tomar consulta de embarazo tenían entre 10 y 19 de edad en 1997, “lo cual llamó la atención y se crea este Centro de Atención a la Adolescente Embarazada en 1998”.

Indicó que en los primeros años de que se creó este Centro de Atención “nuestras observaciones fueron que las pacientes no sabían tanto de anticoncepción, les hacía falta orientación sobre este tema o les daba pena acudir a preguntar o estaban mal informadas”.

Manifestó que también estaban los factores ambientales, “se repite mucho que sean hijas de madres adolescentes o de madres solteras, los modelos familiares continúan”.

Mencionó que otro de los factores es el adelanto de la menstruación, ya que en años pasados la primera menstruación se presentaba en las jóvenes de alrededor de 14 y 15 años de edad.

Detalló que en estos último años la menstruación se ha adelantado a 12 y 13 años, “y este año estamos entre 10 y 11 años de edad cuando comienzan a menstruar, esto hace que tengan inicio de relaciones sexuales precoces, y más fácil se embarazan porque ya empezaron a menstruar”.

Señaló que en años pasados era casi un tabú que la madre platicara con las chicas sobre la menstruación “y mucho menos de las relaciones sexuales, y estos eran los factores que habíamos observado para el embarazo en adolescentes”.

Dijo que en los últimos dos o tres años esto cambió, “las chicas están muy informadas sobre anticoncepción, saben que pueden acudir a los centros de salud, incluso saben de la píldora de emergencia del día siguiente, pero muchas buscan el embarazo porque creen que a través de tener un hijo es como pueden retener a su pareja”.

Expresó que en la actualidad uno de los principales factores del embarazo en adolescentes es que ellas los buscan, “pero la no comunicación entre padres e hijas es primordial para evitar estos embarazos”.

Añadió que además “tenemos más consumo de alcohol y de drogas en las mujeres, y esto hace que ellas al estar fuera de control tengan relaciones sexuales y crean que en una primera relación no se van a embarazar”.

“Necesitamos incidir en la familia, que ésta sea la que tome las riendas de platicar, no podemos obligar a una adolescente porque por su edad están en contra de todo lo que un adulto les pueda orientar o exigir, porque llevan la contra”.

Explicó que se requiere que los padres entiendan que sus hijas adolescentes “también tienen necesidades, que les den esa apertura, que no haya tabúes, para que puedan preguntar sobre sexualidad, métodos anticonceptivos, noviazgo y enfermedades de transmisión sexual, y que no se tenga temor a nivel familiar de contestar estos temas”.

Comentó que si la familia no puede contestar estas preguntas, los padres junto con los hijos deben acudir a disipar todas sus dudas con los especialistas.

Afirmó que en Jalisco hace falta una clínica especializada en adolescentes, “ya que aquí con nosotros tenemos atención para adolescentes embarazadas, pero deben existir quizá clínicas o consultorios con gente capacitada específicamente para adolescentes”.

“Se requieren estas clínicas o consultorios con especialistas que sepan cuáles son las alteraciones de las adolescentes, cómo se tienen que tratar y para que puedan atenderlas, porque no es lo mismo un adulto que un menor de edad”.

Precisó que la adolescencia se divide en tres etapas: temprana, media y tardía; “la adolescencia temprana es de 10 a 14 años de edad, la media es de 14 a 16 y la tardía es de 16 a 19.

“Sobre todo en las adolescencias temprana y media el organismo no está físicamente apto para tener un embarazo, ya que ellas están en desarrollo”.

Citó, como ejemplo, que la niña crece, su organismo necesita calcio y su bebé durante el embarazo requiere también calcio, “entonces se descalcifica esa paciente porque el bebé no entiende de donde lo va a tomar pero él lo requiere, y si tampoco tiene los nutrientes necesarios estos niños nacen desnutridos y por ende tienen mayor riesgo de muerte”.

Resaltó que otro caso sería que la adolescente no entiende que está embarazada “y no hace caso de todo lo que tiene que ingerir para primero cubrir los requerimientos de su organismo y después ingerir los requerimientos del bebé”.

Agregó que psicológicamente la adolescente no es estable, “no sabe ni qué es ni a donde va, entonces mucho menos la relación de ella con ese embarazo”.

Destacó que las adolescentes “deben saber que no están solas, que en casa son necesarias y queridas, siempre deben platicar con la familia y los padres deben creerles, porque a veces no entienden lo que ellas sienten o quieren transmitir, por lo que deben estar en más contacto con sus hijos”.

Subrayó que los padres tienen que ser quienes orienten a sus hijas y “no que esa información la adquieran por otras personas, porque a veces toman decisiones que no son fáciles como abortar o terminar esos embarazos en lugares que no son propios y que les pueden causar mayor problema”.

“Si los familiares tienen dudas o no se crean con capacidad de poder hablar con sus hijos sobre estos temas, deben buscar ayuda a nivel sector salud o a nivel escolar, para poderlos orientar debidamente”, concluyó.

Por Hugo Pescador Pacheco / elarsenal.net