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México

El empleo en México en 2025: Estabilidad en el desempleo, pero retroceso en la calidad laboral

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Ciudad de México, 30 de septiembre de 2025 – A nueve meses de iniciado el año, el mercado laboral mexicano presenta un panorama mixto: una tasa de desempleo históricamente baja que sugiere avances en la inclusión de la fuerza de trabajo, pero un aumento en la informalidad que evidencia retrocesos en la calidad de los empleos y el acceso a derechos laborales. Con 60.8 millones de personas ocupadas al cierre de julio, el país ha generado puestos de trabajo, aunque la mayoría en el sector informal, lo que agrava desigualdades y limita el crecimiento económico sostenible.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la tasa de desocupación se ubicó en 2.9% en agosto de 2025, afectando a 1.8 millones de personas económicamente activas. Este indicador representa una ligera alza respecto al 2.8% de julio, pero es inferior al 3% registrado en agosto de 2024, lo que indica una mejora anual en la absorción de mano de obra. En el segundo trimestre (abril-junio), la desocupación se mantuvo estable en 2.7%, con una población desocupada de 1.6 millones. Sin embargo, esta estabilidad oculta desafíos: la subocupación bajó a 7.3% en julio, pero persiste en sectores vulnerables como el rural, donde la desocupación es solo del 1.6%, a menudo por falta de oportunidades formales.

En contraste, la informalidad laboral ha escalado, alcanzando el 54.8% de la población ocupada en agosto, equivalente a 32.6 millones de trabajadores sin seguridad social ni prestaciones. Este repunte de 0.6 puntos porcentuales anuales en el segundo trimestre refleja un crecimiento de 398 mil personas en empleos informales, impulsado por sectores como el comercio y los servicios. En julio, la cifra subió al 56.1%, con 34.1 millones afectados, superando en 1.6 puntos el nivel de 2024. Analistas señalan que esta tendencia, que ya abarcaba a más de la mitad de los ocupados, se acelera por la desaceleración económica y la preferencia empresarial por mano de obra flexible.

Por el lado formal, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reporta 22.45 millones de puestos asegurados en agosto, un incremento modesto de unos 200 mil respecto al cierre de 2024 (22.23 millones). No obstante, la creación neta ha sido irregular: en el primer trimestre se generaron 226 mil empleos (0.8% de crecimiento interanual), pero el segundo trimestre vio una pérdida de 139 mil plazas. Enero registró solo 73 mil nuevos puestos, la cifra más baja en nueve años, y los primeros cinco meses acumularon apenas 133 mil, un 60% menos que en 2024. Sectores como transportes y comercio lideran el crecimiento, pero la industria manufacturera y la construcción muestran caídas.

Este escenario mixto plantea interrogantes sobre si México avanza o retrocede. El bajo desempleo es un logro que reduce la pobreza inmediata y fomenta el consumo, contribuyendo a un crecimiento proyectado del PIB en torno al 1-2% para 2025. Sin embargo, la expansión de la informalidad erosiona la base contributiva del IMSS y agrava la desigualdad: los trabajadores informales ganan en promedio 40% menos y carecen de protección ante contingencias. Para el público general, esto significa mayor vulnerabilidad familiar, menor acceso a salud y pensiones, y un freno al bienestar social. Expertos urgen políticas como incentivos fiscales para formalización y capacitación en sectores estratégicos para revertir esta deriva.

En resumen, mientras el desempleo marca un avance, la informalidad señala un retroceso estructural que demanda atención inmediata del gobierno entrante. Monitorear estos indicadores será clave para medir el impacto de reformas laborales en los meses venideros.

Fuentes verificables utilizadas:

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