El decoro de una mujer que parió sobre el pasto

Irma López Aurelio, cuya imagen dio la vuelta al mundo mientras daba a luz sobre la hierba porque le negaron atención médica en un hospital de Oaxaca, dijo ayer a la agencia Quadratín que “me da gusto que sacaron esa foto, si no fuera así, la gente va a seguir igual, como yo pasé”.

Con la misma dignidad que alumbró a su hijo enfrente de personal médico indolente y decenas de curiosos, la indígena mazateca aseguró que no le avergüenza la foto: “Que se vea que nos tratan como si fuera un animal”.

Ahora es amenazada con quitarle los 700 pesos al mes que recibe del programa Oportunidades si denuncia el maltrato recibido en la clínica de San Felipe Jalapa de Díaz: “Voy a hablar con quien venga, no tengo miedo. Si ese dinero lo manda el gobierno, no tienen porqué quitármelo”.

Pero los culpables tienen nombre:

—La  enfermera Juliana García Nicolás la vio con dolores y le dijo que mejor caminara para que se le quitaran. “Esa enfermera dice que yo no diga nada de los médicos, que pida para el niño, pero no hable de la clínica”.

—La doctora Cecilia Ruiz Barrita firmó una hoja de atención del recién nacido, a pesar de que éste nació sobre la hierba y ni asistió al parto.

—La dirección del hospital le cobró medicamentos, jeringas, jabón y cloro, después de haberla obligado a dar a luz en el patio.

Pero el gran responsable es el gobierno de Oaxaca, encabezado por Gabino Cué, cuya Secretaría de Salud, por lo único que se ha preocupado es por reclamar que fueron violados los derechos humanos de Irma López Aurelio al ser divulgada su imagen pariendo sobre la hierba.

Es enaltecedor que Irma avale la publicación, aunque de todos modos, protagonizó una situación que originó una polémica por la irresponsabilidad y el abuso de las autoridades. Aun cuando le disgustase la foto, es un asunto que la trasciende como individuo.

De no ser por la foto que le tomó el reportero Eloy Pacheco, no sabríamos que en Oaxaca obligaron a una mujer a dar a luz como un animal. Que eso sucede en el México actual y los causantes del hecho tienen que ser sancionados ya.

Es natural que exista una polémica por la publicación de la foto. Pero también es digno de elogio que exista una polémica porque es prueba de dos cosas:

1.- De que mucha gente cree que se trató de un hecho ultrajante.

2.- De que mucha gente prefiere mirar para otro lado ante un hecho ultrajante.

Es el tipo de gente que, cuando le disgusta el mensaje… se lo quiere cobrar al mensajero.