Obligación del Gobierno reflexionar la política económica actual: LMC

La caída de la moneda nacional frente al dólar estadounidense en las últimas semanas refleja, además de la fuerte influencia de la caída en los precios del petróleo y la volatilidad de los mercados financieros internacionales, la falta de eficiencia que distinguió al sexenio anterior en materia de política económica y que en los dos primeros años de la actual administración ha implicado el perder la estabilidad financiera que se alcanzó en ese periodo, señaló la Senadora Luisa María Calderón Hinojosa.

La legisladora por Acción Nacional afirmó que no existe una atención puntual, responsable y profunda en aspectos como la ausencia de credibilidad gubernamental y la crisis de seguridad pública que se vive en distintos puntos del país, elementos indispensables para tener finanzas sanas.

Recordó que durante las administraciones de Acción Nacional, particularmente en el sexenio pasado, hubo un manejo prudente de las finanzas públicas del país que permitió tener estabilidad macroeconómica y una tasa anual de crecimiento del Producto Interno Bruto superior al dos por ciento, incluso a pesar de la compleja situación en materia de seguridad pública y la crisis económica internacional.

La Senadora Calderón Hinojosa destacó que los niveles históricos que ha alcanzado el dólar a la venta en el país en las últimas semanas, de acuerdo con el Banco de México, es consecuencia ineludible de la debilidad económica actual, la falta de prudencia en las decisiones financieras y el impacto negativo en el entorno financiero de la poca confianza gubernamental que predomina en el país, aspectos que obligan al Gobierno Federal a reflexionar en torno a la política económica que se está aplicando.

“La meta de tener un México con una economía sana implica tener un manejo eficiente de los recursos de la nación, pero también atender de manera puntual temas diversos como la seguridad pública, la educación, el empleo y la credibilidad institucional por supuesto”, detalló.

La Senadora por Michoacán señaló que estos elementos obligan pensar con plena responsabilidad la pertinencia de las políticas que se están aplicando al interior y exterior, desde el comienzo de la actual administración, para frenar la depreciación de nuestra moneda, la pérdida de competitividad de nuestro mercado, los altos niveles de inflación y sobre todo el impacto negativo en las finanzas de los mexicanos.

“El peso mexicano ya retrocedió 16.10 centavos, lo equivalente a 1.11 por ciento. La depreciación de nuestra moneda es consecuencia de la debilidad y la inestabilidad económica que estamos atravesando, producto de las malas decisiones que se han tomado en la materia como la reforma fiscal impulsada por el Ejecutivo en este año. Otro factor determinante es la falta de credibilidad en la actual administración federal, que influye de manera determinante en el entorno financiero”, añadió.

La Senadora por Michoacán resaltó que en tan sólo 24 meses se ha perdido la estabilidad económica y el ritmo de crecimiento que se tenía en el sexenio anterior, y detalló que si bien los beneficios de las reformas estructurales en materia de competencia, crecimiento económico y desarrollo aún no se materializan, es urgente reflexionar y replantear las premisas de la política económica actual para que ésta pueda ser plataforma sólida de esos cambios hacia el futuro.