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Congreso del Estado de Michoacán

Opinión

Oportunistas de la humillación

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El caso del niño tzotzil humillado en Tabasco por un funcionario público desembocó en más humillación. Como si se tratará de un “bicho raro” fue expuesto en el talk show de Rocío Sánchez Azuara, “Cosas de la vida”. ¿En verdad era necesario?

La señora Azuara llevó lo que fue en un inicio una denuncia, una noticia, al espectáculo, a la exhibición. A sus cuestionamientos (incluso ridículos, le preguntó que si quería ser su novio) hubo escasas respuestas (el menor habla muy poco el español) y más lágrimas.

Pero lo que rebasó el show fueron los consejos de los “especialistas”, la abogada le trató de informar a Feliciano que “como niño ciudadano mexicano e independientemente de su origen, todas las leyes del país lo protegen”. ¡Ya por favor! ¿Es una burla? ¡Era claro que el niño no tenía ni la remota idea de lo que estaban diciendo¡ Y si las leyes en verdad lo protegieran no viviría con las carencias que vive.

Tal parece que sólo se está a la espera de situaciones como esta para capitalizar la bondad, incluso la primera dama Angélica Rivera fue parte de esto al girar órdenes al DIF para “ayudar” al pequeño con una beca y un “proyecto productivo” que consiste en la instalación de una papelería; pero recordemos que hay miles de Felicianos en el país.

Regalos, ayuda, no es por menospreciarlos, pero son meros paliativos que pudieran resolver en lo inmediato sólo algunas de las carencias que vive la familia de Feliciano, mas no así las de millones de niños, niñas y familias enteras en circunstancias similares. Hacen falta políticas públicas integrales que resuelvan la problemática de raíz.

Hay que ver y tratar el tema de fondo, esto es un problema de pobreza, de falta de oportunidades, de falta de acceso a la educación, de marginación, de discriminación. De acuerdo con la organización civil Melel Xolobal en Chiapas hay 82 mil 276 niños de 5 a 14 años que realizan alguna actividad económica, de los cuales 92 por ciento son indígenas. ¿Entonces, en dónde están las leyes que protegen a estos menores?

Es vergonzoso que en este país se tenga que ser humillado, asesinado, desaparecido, víctima, u otra condición de vulnerabilidad, para dejar de ser invisible.

 por  / elarsenal.net

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